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La eficiencia energética: ¿qué es y por qué resulta importante?

 

Reformar una casa para aumentar su eficiencia energética es una decisión que vemos cada vez más a menudo. Y es comprensible, ya que, de entre las muchas razones que pueden llevarlos a decidir realizar una reforma, la eficiencia energética es, seguramente, una de las más interesantes.

El principal motivo es el ahorro a largo plazo: como es lógico, una vivienda más eficiente consumirá menos energía, lo que convierte la reforma en una inversión muy provechosa que se recupera mes a mes desde el momento en el que se concluye.

En este contexto la eficiencia energética hace referencia, en general, a todas las instalaciones y reformas que permiten reducir el consumo de energía. No se trata de establecer un tope de consumo, ya que este dependerá siempre de las características de la vivienda, sino de reducir el uso de energía de forma notable.

¿Qué reformas hacer en una vivienda para aumentar su eficiencia energética?

Lo primero siempre será que una empresa de reformas profesional realice un análisis pormenorizado de la vivienda para comprender mejor sus características y necesidades. No obstante, independientemente de las reformas específicas que requiera nuestro hogar, hay una serie de cambios que y pequeñas reformas que son aplicables a casi todas las construcciones. Son los siguientes:

 

 

1. Cambiar las ventanas

 

Cuando pensamos en reformar una casa para aumentar su eficiencia energética, unas ventanas bien selladas serán, con toda seguridad, lo primero que nos venga a la mente. La conservación del calor generado por la calefacción depende en buena medida de la calidad y condiciones de las ventanas -lo recomendable es PVC o aluminio de alta calidad-, por lo que invertir en este punto siempre es una buena idea. Si es posible, debemos invertir en ventanas con rotura de puente térmico, que impiden que el frío penetre en la vivienda.

 

 

2. Instalar generadores de energía renovable

 

Los paneles solares suponen una importante inversión, pero sus beneficios son evidentes: pueden calentar el agua sanitaria, si son térmicos, o generar electricidad, si son fotovoltaicos. Dependiendo de dónde vivamos, el ahorro en energía mes a mes puede ser considerable.

 

 

3. Instalar sistemas de recirculación de agua

 

Estos sistemas sirven para evitar desperdiciar agua fría: la mantienen en circulación hasta que se calienta, y solo en ese momento comienzan a renovarla. Son cada vez más  habituales en los nuevos lavabos, y no solo suponen un importante ahorro en la factura del agua, sino que contribuyen a reducir el gasto de un bien, el agua, realmente escaso.

 

4. Analizar la fachada e instalar aislamientos

 

La fachada, permanentemente expuesta al exterior, es otro de los factores clave a la hora de reformar una casa para aumentar su eficiencia energética. Si queremos reducir nuestro consumo de energía, deberemos realizar un análisis térmico de la fachada que detecte las partes más frías para, posteriormente, reforzarlas con materiales aislantes.

 
Hay otras maneras de incrementar la eficiencia energética de una casa, dependiendo, como decíamos al comienzo, de cuáles sean sus características. En VUSA Construcciones estaremos encantados de realizar un estudio completo de tu casa y aconsejarte sobre todas las reformas que se pueden llevar a cabo para que comiences a ahorrar dinero cada día.

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