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Cómo revalorizar una casa con una reforma: lo que debes tener en cuenta

 

Revalorizar una casa con una reforma integral es una decisión que toman muchos propietarios cuando finalmente deciden que ha llegado el momento de vender su vivienda. Es comprensible: una reforma implica gastos económicos, mucha planificación y no pocos quebraderos de cabeza, pero también es una gran oportunidad para aumentar el valor del piso antes de venderlo. Así, el gasto que realicemos se convierte en una inversión. Maximizar los beneficios: ¿no es ese el objetivo en cualquier venta?

Por supuesto, antes de nada hay ciertas cuestiones en las que tendremos que pararnos a pensar. Por ejemplo, si tenemos urgencia por vender, probablemente no nos conviene hacer reformas, por mucho valor que puedan añadir a la casa. Tampoco es recomendable si –y esto es muy habitual– queremos vender para, inmediatamente después, comprar otra vivienda. En ese caso, será preferible tener un control total sobre los tiempos de la venta.

Pero en muchas otras situaciones, revalorizar una casa con una reforma puede ser una excelente idea. Se suele decir que una buena reforma integral puede aumentar el valor de una casa hasta en un 20%, ¡casi nada! Así que, como vemos, es una decisión que por lo general merece la pena.

 

¿Qué reformar o cambiar para revalorizar una vivienda antes de venderla?

 

Una reforma integral para revalorizar una casa debe ser una inversión. Por lo tanto, no queremos cambiar completamente el aspecto de la casa, sino mejorar o cambiar los elementos que más impacto pueden tener en el precio final. Destacan cinco: instalaciones, aislamientos, ventanas, materiales y elementos exclusivos.

 

Cambiar las instalaciones

Las instalaciones no se ven, así que es fácil obviarlas, pero sería un gran error: su calidad y condición tienen un impacto fundamental sobre el precio final de la vivienda. Los circuitos de agua, gas, electricidad y aire deben estar en perfectas condiciones. Con unas instalaciones obsoletas, nuestro beneficio será mucho menor.

Mejorar los aislamientos

No lo dudes: los posibles compradores tendrán muy en cuenta el nivel de eficiencia energética de nuestra vivienda. Las nuevas casas se construyen para ahorrar tanta energía como sea posible, por lo que mejorar los aislamientos de nuestra vivienda nos ayudará mucho a elevar su precio final. Al fin y al cabo, es un dinero que los nuevos propietarios terminarán ahorrándose, a largo plazo.

Cambiar las ventanas

También merece mucho la pena invertir en las ventanas, ya que todos los posibles compradores se fijarán en ellas. Unas ventanas de mala calidad pueden llevarles a pensar que el aislamiento de la casa es deficiente, lo que haría que pidiesen una rebaja en el precio final. Debemos asegurarnos de que nuestro piso tiene ventanas modernas y de buena calidad antes de ponerlo a la venta.

Elección de materiales

Por supuesto, cualquier mejorar en los materiales de la vivienda influirá también en el precio, en especial si optamos por materiales de alto nivel: madera maciza, encimeras de piedra, etc. Por su elegancia, impresión de durabilidad y evidente coste económico, son materiales que ningún comprador pasará por alto.

Elementos exclusivos

Para revalorizar una casa con una reforma, la instalación de elementos exclusivos es una de las claves más importantes. Nos referimos a elementos constructivos especiales que aporten mucho valor a la vivienda: sistemas de calefacción avanzados (como la calefacción por suelo radiante, por ejemplo), griferías con acabados de gama alta, sistemas domóticos, etc.

 

Además de todo esto, para revalorizar una casa con una reforma deberás contar con una empresa de reformas y construcción que entienda tus necesidades y te ofrezca las mejores soluciones para cumplir con tus objetivos. Una empresa como VUSA.

Si quieres saber cómo podemos ayudarte, llámanos ahora al 944 571 890 o escríbenos a vusa@vusagaldako.com y te asesoraremos sin ningún compromiso.