Noticias

Reformar una casa antigua: consejos para antes de empezar

Reformar una casa antigua: consejos para antes de empezar

Cómo reformar una casa antigua sin sustos ni sobrecostes

Reformar una casa antigua es todo un reto, en el que podemos encontrarnos con numerosas sorpresas, decepciones y, sobre todo, gastos inesperados. Y es que no resulta nada sencillo conseguir rehabilitar una casa antigua para que se convierta en un espacio moderno y habitable que mantenga, al mismo tiempo, su esencia original. Por ello, nada mejor que confiar en una empresa de construcción y reformas profesional, y, sobre todo, planificar la obra con antelación.

 

Planificación y contar con buenos profesionales de la construcción

 

Así es: la planificación es, sin duda, el factor principal a la hora de afrontar este tipo de trabajo de reformas. Debemos tener claro exactamente qué queremos hacer y con qué presupuesto contamos. De esa manera, será más fácil evitar sobrecostes que nos amarguen la obra. En esta fase previa es recomendable que consultemos sitios web, revistas y publicaciones de las que extraer ideas para nuestro proyecto. 

Es muy recomendable solicitar presupuestos detallados a varios profesionales de la construcción, para que podamos comprar tanto los precios como, sobre todo, lo que ofrece cada uno: materiales de construcción, técnicas, plazos… en este punto es importante tener presente que, como se suele decir, lo barato sale caro. Elegir una buena empresa de construcción es una de las bases de una reforma exitosa. No deberíamos optar por el proyecto de reforma que sea más barato, sino por la propuesta que nos parezca más sólida. A largo plazo, ganaremos en tranquilidad, e incluso nuestro bolsillo lo notará.

 

Puntos clave de la reforma

 

A la hora de distribuir el presupuesto para reformar una casa antigua, lo ideal es que nos dejemos guiar por el arquitecto o el equipo técnico que hayamos contratado. Ellos identificarán los puntos débiles del inmueble y nos indicarán los cambios que es posible realizar en su estructura. Aquí es donde nuestro proyecto inicial comenzará a adaptarse a las circunstancias reales de nuestra casa antigua.

Muy probablemente deberemos invertir en sistemas de aislamiento térmico y acústico. En la rehabilitación de una casa antigua buscamos adaptar la vivienda a las necesidades y estándares más modernos, y eso siempre suele incluir una mejora en los aislamientos. Tal vez haya que cambiar puertas y ventanas, o al menos restaurarlas, y añadir nuevos sistemas de climatización. 

Al reformar una casa antigua, también suele ser necesario ocuparse de las instalaciones. Las tuberías normalmente se encuentran en malas condiciones, o incluso pueden estar fabricadas con materiales obsoletos. Lo mismo se aplica a los sistemas eléctricos. En ambos casos, la inversión inicial se verá compensada por el ahorro que notaremos a largo plazo. Deberemos tenerlo en cuenta al elaborar nuestro presupuesto inicial.

Por último, también deberemos lidiar con las humedades, que se encuentran de forma muy habitual en las viviendas antiguas, y más aún si han pasado mucho tiempo deshabitadas. Independientemente de la solución que apliquemos (pinturas anti humedades u otros procedimientos), será imprescindible solucionar el problema de las humedades y los desperfectos que hayan podido causar antes de continuar con la reforma.

 

Esperamos que estos consejos te ayuden a orientarte cuando comiences a elaborar tu proyecto para reformar una casa antigua. Como te decíamos al principio, este tipo de obras de rehabilitación son un auténtico desafío, pero también resultan muy satisfactorias. Los resultados merecen la pena.

Y si necesitas el asesoramiento de un profesional y quieres tener de tu parte a una empresa de construcción profesional referente en su sector, no lo dudes y recurre a VUSA Construcciones. Llevamos más de medio siglo ocupándonos con éxito de proyectos como el tuyo.

Llámanos ahora al 944 517 890 o escríbenos a vusa@vusagaldakao.com y comencemos a trabajar juntos. ¡Te esperamos!